Pero el hecho es que no existía tal nacionalidad: los habitantes de la América española eran súbditos del Rey de España, pero no tenían una «nacionalidad española»; no existía tal igualdad legal entre españoles europeos y americanos, no eran lo mismo (de hecho la Independencia se debió en parte a esa discriminación). Un juego con una apariencia divertida y familiar que sirve como antesala para una propuesta mucho más seria y arriesgada, donde los jugadores pueden obtener dinero a cambio de jugar.